10 abril 2018

Un largo adiós para el 'Cholo'

La salida de Fernando Torres del club 'colchonero' era la crónica de una muerte anunciada... siempre y cuando Simeone siga sentándose en el banquillo del Atlético, cosa que no parece vaya a cambiar de cara a la próxima campaña. El técnico argentino ya había anunciado que no iba a mover un dedo para facilitar la continuidad del delantero de Fuenlabrada, quien se ha anticipado a los acontecimientos (y a todos) y su determinación ha cogido al aficionado rojiblanco con el pie cambiado.

No es extraña su decisión de abandonar el club al finalizar la temporada ya que a nivel deportivo ha ido perdiendo protagonismo desde que regresó al Atleti. Sus dos goles en el Bernabéu en los octavos de final de la Copa del Rey 2014-15, fueron, de cara al aficionado, su máxima expresión, pero no casó bien con el técnico, que le fue relegando paulatinamente al ostracismo. La relación con el 'Cholo' se ha ido deteriorando y como testigo siempre ha estado una afición que ha querido por igual a entrenador y jugador. En esa lucha de egos el delantero sale ganando, ya que se ha comportado con una elegancia exquisita y siempre ha puesto, por encima de cualquier otra circunstancia, el amor al club y a unos colores.

Lo que si podría ser peligroso tanto para el equipo como para el propio Simeone es una posible división de la afición, algo que se verá en los próximos partidos en el Metropolitano. Pienso que hubiera sido bonito que un jugador que es un ídolo y un icono en un club como el Atlético de Madrid, hubiera tenido el broche de oro a una bonita carrera como jugador retirándose en el club de su vida. Por su parte, el club ya ha adelantado que en la última jornada de Liga ante el Eibar se hará un homenaje al jugador.

Sinceramente no creo que el no jugar ni un minuto en el derbi haya podido influir en su postura. No ha sido un 'calentón', seguramente el vaso ya había rebosado antes del choque liguero en el Bernabéu. Cierto que le hubiera gustado jugar (como mínimo) esos 10-15 minutos que le estaba dando Simeone, pero esta vez el argentino prefirió a Kevin Gameiro por delante del punta madrileño. Si jugó los últimos 20 minutos ante el Deportivo de La Coruña, pero frente al Sporting de Portugal, en la ida de los cuartos de final de la Europa League, no saltó al césped. Y es que, como ya ha demostrado en más de una ocasión, Simeone prefiere a Correa y Gameiro antes que a Torres.

Y es que como es lógico la edad no perdona, aunque su nivel físico siga siendo bueno. Torres se cuida mucho, va al gimnasio, hace boxeo y está estilizado. Pero Fernando quiere más, el delantero está convencido de ser merecedor de más minutos sobre el terreno de juego, especialmente en las dos últimas campañas. Y, por su parte, el técnico podrá argumentar que siempre pone a los que cree mejores para cada partido. De hecho, en la final de Milán ante el Real Madrid el 'Niño' fue titular. Sin embargo, nunca ha gozado de la total confianza del 'Cholo', que pensará que le dio partidos y oportunidades suficientes para demostrar su categoría, para demostrar que está capacitado para rendir en un equipo que aspira, en teoría, a estar entre los mejores y luchar por los títulos, aunque la realidad refleje que el Atlético de Madrid lleva desde agosto de 2014 (Supercopa de España) sin ganar nada.

¿Y dónde jugará Torres a partir del curso que viene? Esa es la pregunta del millón en estos momentos. A día de hoy el delantero no ha decidido su futuro, pero podrá elegir. La Superliga china o la MLS de Estados Unidos son los destinos que se avistan con más posibilidades, pero no serán los únicos. En México ya tuvo un equipo interesado en sus servicios, y desde Europa también llamarán a su puerta (Turquía, Portugal...). Es cierto que ya ha cumplido 34 años, pero él quiere seguir compitiendo, porque se ve en perfectas condiciones para hacerlo. En cualquier caso, el deseo de Torres es centrarse en el Atlético en este mes y medio que le queda de competición con el conjunto rojiblanco y, una vez acabe la temporada, pensar detenidamente con los suyos dónde se marchará.