El pasado 10 de noviembre la firma norteamericana Nike presentó en Varsovia las nuevas equipaciones que vestirá la selección polaca de cara a la Eurocopa que se disputará en Polonia y Ucrania el próximo mes de junio.
El clásico uniforme blanco y rojo de los 'Białe Orły' presentaba algunas novedades, empezando por el nuevo escudo de la Asociación Polaca de Fútbol (Polski Związek Piłki Nożnej - PZPN) que sustituye al tradicional emblema nacional polaco del águila coronada. Además, los diseñadores de la marca del 'swoosh' han decidido innovar con una banda horizontal roja en la parte central de la camiseta, donde se ubica el número, volcado al margen derecho. El modelo recuerda al utilizado como segunda equipación por la selección de Turquía, también vestida por la firma norteamericana.
Las protestas no se hicieron esperar y fueron evidentes durante los dos amistosos que Polonia ha disputado con la nueva equipación, sobre todo en el jugado frente a Hungría, cuando el escaso público coreó frases como "¿Dónde está el águila?" o "Polonia no es Polonia sin el águila". Los aficionados criticaban que en la nueva elástica el águila apareciese representada de manera artística a través de unas difusas líneas rojas, mezcladas con las doradas de la corona, formando un conjunto abstracto alejado de la imagen tradicional del ave coronada, la misma que conforma el emblema nacional.
La portavoz de la PZPN, Agnieszka Olejkowska, ha comparecido ante los medios polacos esta misma mañana anunciando la decisión de volver al modelo tradicional de camiseta, donde el águila coronada luce en el pecho de los jugadores, después de la 'ola de protestas' que provocó el nuevo modelo. Incluso Grzegorz Lato, ex delantero de la selección polaca, máximo goleador en el Mundial de 1974 y actual presidente de la PZPN ha pedido perdón a la hinchada de su país. "Pido perdón a los aficionados. Únicamente puedo decir que sólo cometen errores quienes no hacen nada".
Así el águila coronada volverá a la camiseta de la selección polaca, tras las críticas que provocó entre políticos y aficionados, que consideraron intolerable la desaparición del símbolo nacional de su país. La elástica sin el águila se retirará sólo dos semanas después de su presentación y de que hasta el presidente de Polonia, Bronislaw Komorowski, hiciese pública su decepción con la nueva imagen del combinado nacional polaco.
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